Vivía hace 80 millones de años. Fue encontrado en la costa y es el segundo que avistan los responsables del acuario de Shizuoka en los últimos diez años, dijeron fuentes del parque. El tiburón anguila es casi imposible de divisar porque permanece entre 600 y mil metros de profundida marina y pudo ser filmado poco antes de su muerte.
Al parecer, el tiburón anguila «había subido a la superficie en busca de aguas más templadas y posiblemente las corrientes lo desorientaron», explicaron las fuentes del acuario donde fue trasladado el escualo antes de morir.
Esta ha sido la segunda vez en diez años que un tiburón anguila es localizado en esa costa japonesa, pero la única en que fue capturado con vida, lo que permitirá a los científicos entender un poco más a esta reliquia marina. Se trata de un «fósil viviente» que apenas ha evolucionado desde la prehistoria y su aspecto recuerda más a una serpiente o a una anguila, de ahí su nombre, que a sus parientes los tiburones grises o blancos.
«Tiene un par de agallas más que los demás tiburones y sus dientes están afilados en forma de tridente», explicaron las fuentes del ‘Awashima Marine Park’. El animal fue encontrado por un pescador en la bahía de Suruga (al oeste de Tokio) que, sorprendido, se puso en contacto con el parque marino, desde donde se envió a un equipo de personas para encargarse del tiburón.
Según fuentes del acuario, que grabó al escualo, éste estaba débil y desorientado cuando lo encontraron y no pudieron hacer nada por salvarle la vida. Se trataba de un ‘Chlamydoselachus anguineus’ hembra, de 1,6 metros de longitud y 7,5 kilogramos de peso que murió pocas horas después del traslado al centro.
En estos momentos el escualo está congelado a la espera de que los responsables del parque tomen una decisión sobre su futuro, si bien lo más probable es que se ceda a la investigación científica o que se diseque para su posterior exposición.
Los tiburones anguila son peces que habitan las profundidades de los océanos, entre los 600 y los 1.000 metros, son casi ciegos, pueden llegar a medir hasta dos metros y se alimentan principalmente de otros peces óseos y cefalópodos.