Las emisiones de dióxido de carbono de los países industrializados aumentaron en 2005, según estimaciones de la ONU publicadas el martes, a menos de un mes de la Conferencia de Bali (Indonesia), que debe elaborar la continuidad del Protocolo de Kioto, después de 2012.
«Las emisiones de gases de efecto invernadero experimentaron niveles próximos al récord: tras el descenso entre 1990 y 2000, comenzaron a aumentar entre 2000 y 2005, un 2,6%», indicó el martes en Bonn Yvo de Boer, scretario ejecutivo de la Convención de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (UNFCCC), en una conferencia de prensa difundida en directo por internet. La ONU había hablado en principio de «récord absoluto».
Según De Boer, esta tendencia alcista se debe «al mismo tiempo a los países muy industrializados y a los países del antiguo bloque del Este, que han reanudado su crecimiento económico». El sector del transporte es donde las emisiones han «aumentado con un ritmo más rápido».
Los firmantes del Protocolo de Kioto se comprometieron a reducir en un 5% sus emisiones para el período 2008-2012 con respecto a 1990, pero sólamente los 36 países industrializados citados en el Anexo 1, han respetado los objetivos «diferenciados» de reducción.
A pesar de todo, la ONU ha estimado una reducción total del 11% entre 2008 y 2012 para los países industrializados que ratificaron Kioto, haciendo valer que en 2005 ya estaban «entre un 3 y un 5% por debajo de sus niveles de 1990».
Esta proyección reposa en gran parte en los resultados de 17 «economías de transición» de Europa del Este, cuyas emisiones han llegado a reducirse a la mitad (Estonia), e incluso un 58% (Letonia), tras el cierre de las fábricas o de las centrales eléctricas obsoletas heredadas de la era soviética.
Con respecto a Estados Unidos y Australia, que no ratificaron el tratado y no están sometidos a ninguna obligación, aumentaron su emisión de gases de efecto invernadero en un 16,3 y un 25% entre 1990 y 2005.
También apuesta el desarrollo del mercado del CO2 en los próximos años, subrayando que el Protocolo de Kioto ha generado 30.000 millones de dólares en 2006, especialmente en el mercado europeo de permisos de emisión.
El objetivo de un 5% menos parece muy escaso con respecto a las recomendaciones de los expertos del clima nucleados en el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés), que el pasado fin de semana presentaron en Valencia una síntesis de sus documentos según las cuales de aquí a 2050 las emisiones de gases con efecto invernadero deberían ser reducidas en un 50% para contener el calentamiento del planeta en 2 grados centígrados de aquí a final de siglo.
«Es seguro que queda mucho por hacer para llegar a lo que los científicos juzgan necesario. Es por lo que poner en marcha el proceso de Bali es tan esencial, con un calendario y una fecha tope», insitió De Boer.
Fuente: AFP