Los ministros reunidos en Alemania aprobaron una iniciativa destinada a sacar el debate sobre la biodiversidad de los círculos de expertos y llevarlo a negociaciones entre jefes de gobierno. En paralelo, Greenpeace pidió acciones concretas para enfrentar el cambio climático, tema que será abordado este sábado por el G8.
Los ministros de Medioambiente del G8 y de los cinco países emergentes -Brasil, México, China, India y Sudáfrica- quieren darle a la discusión sobre la biodiversidad el mismo relieve que tiene ya el debate sobre el cambio climático.
Para ello, los ministros, en su reunión en la ciudad alemana de Potsdam que continuará el sábado, aprobaron este viernes una iniciativa sobre la biodiversidad destinada, según el anfitrión alemán Sigmar Gabriel, a sacar el debate de los círculos de expertos y llevarlo a la opinión pública y a las negociaciones entre jefes de gobierno.
Un aspecto clave de la iniciativa es encargar un estudio sobre las consecuencias económicas de la destrucción de la biodiversidad, similar al célebre «Informe Stern» sobre el cambio climático.
«Diariamente desaparecen 150 especies. Estamos borrando el banco de datos de la naturaleza a una velocidad dramática», dijo Gabriel al resumir las conclusiones del primer día de debates en Potsdam.
Para mostrar que ese proceso tiene repercusiones económicas, Gabriel dijo que actualmente un 46 por ciento de las especies marinas están en peligro y que, si no se hace nada en contra, en 2050 ya no habrá pesca comercial y no porque ésta vaya a estar prohibida sino porque ya no habrá qué sacar de los mares.
«Ello significaría la pérdida del sustento para millones de personas», sostuvo Gabriel.
Para Gabriel, resaltar la dimensión económica de la destrucción de la biodiversidad es algo fundamental porque sólo así se aumentará la voluntad de invertir en medidas que la contrarresten.
«Tenemos que dejar claro que la biodiversidad no es un tema que sólo le interese a los ornitólogos y a los amantes de la naturaleza», afirmó.
Además de encargar el estudio, que deberá ser realizado por un equipo en que Gabriel quiere que esté presente al menos un científico de los países en desarrollo, la «Iniciativa de Potsdam para la biodiversidad 2010» contiene otra serie de elementos como el resaltar la interdependencia entre la protección del clima y la de las especies.
También destacó que los países en desarrollo y los países emergentes necesitan compensaciones de los países industrializados para poder continuar lo que ya vienen haciendo a nivel nacional para proteger la biodiversidad.
La iniciativa también propone, entre otras cosas, intensificar la lucha contra el tráfico ilegal de plantas y animales, así como la creación de una serie de mecanismos para fomentar el uso sostenible de los recursos naturales.
Greenpeace pide acciones frente al cambio climático
La presente jornada se ha concentrado en el tema de la biodiversidad pero el debate sobre el cambio climático, que será el plato fuerte sabatino, ya ha empezado a llegar a la reunión por las expectativas que éste genera.
Así, «Greenpeace» organizó uno de sus típicas acciones al protestar desde un barco que llegó navegando hasta el lugar del encuentro, el castillo de Cecilienhof situado entre dos lagos.
Allí, unos activistas desplegaron una pancarta en la que instaban al G8 a terminar los discursos y a empezar a trabajar con hechos concretos por la protección del clima.
El director del programa de Medio Ambiente de las Naciones Unidas, Achim Steiner, respondió a la acción de Greenpeace diciendo que «lo que se hable hoy es la base de lo que se haga mañana».
Steiner admitió también que comprendía la impaciencia de algunos ante la lentitud que hay en la toma de decisiones, pero dijo que en los últimos dos años ha habido un cambio en el debate sobre temas ecológicos que permite mirar con optimismo hacia el futuro.
«Si se mira la evolución del debate en muchos países, se puede ver que se han dado algunos pasos y creo que estos han sido en la dirección correcta», dijo Steiner.
Steiner elogió los resultados de la cumbre europea de Bruselas en lo relativo a la protección del clima así como los esfuerzos que vienen haciendo China -con un gigantesco proyecto de reforestación- y Brasil, que ha reducido en un 50 por ciento la tala de bosques.
Fuente: www.elmostrador.cl