La UE acordó ayer, después de una larga batalla entre ecologistas e industria, que los fabricantes de coches europeos tendrán que reducir un 18% la emisión de gases de sus nuevos vehículos, durante los próximos seis años. Las emisiones de dióxido de carbono (CO2) de los nuevos vehículos tendrán que disminuir 130 gramos por kilómetro. La decisión llega mientras en Poznan (Polonia), se celebra la Conferencia de la ONU sobre el cambio climático.
«Este acuerdo representa un equilibrio entre las necesidades del medioambiente y de la industria automovilística», señaló Martin Callanan, legislador británico conservador. Mientras, el compromiso fue atacado por los ecologistas que denunciaron que se ha hecho a medida de las demandas de los fabricantes de coches y que la decisión mina los esfuerzos de la UE por liderar la lucha mundial contra el cambio climático.
El acuerdo provisional, negociado a puerta cerrada, necesitará la aprobación del Parlamento Europeo y de los 27 estados miembros antes de convertirse en ley, pero no se espera que cambie mucho.
Fuente: El País