Desde el pasado mes de agosto, Madrid forma parte con otras 21 grandes ciudades del planeta del “Grupo de Liderazgo de Ciudades del Mundo sobre Cambio Climático”, una alianza con un objetivo claro: unir esfuerzos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, causantes del calentamiento global de la Tierra. Una tarea en la que también está implicada la Fundación Bill Clinton, cuyos miembros visitan Madrid desde el pasado día 4 hasta hoy con la intención de conocer las iniciativas puestas en marcha por el Ayuntamiento de Madrid para luchar contra el cambio climático.
Durante estos tres días, los miembros de la Fundación Bill Clinton, acompañados por los responsables medioambientales del Ayuntamiento de Madrid, han visitado el Parque Tecnológico de Valdemingómez, donde se han empapado de la gestión de los residuos que se realiza en las instalaciones municipales, han mantenido diversas reuniones con los responsables del alumbrado público y han comprobado los sistemas de recuperación de energía mediante el tratamiento de las aguas residuales, entre otros asuntos como el transporte, etc.
La visita ha servido para detectar puntos o modelos conjuntos de colaboración que puedan trasladarse al resto de las ciudades del grupo (Berlín, Buenos Aires, El Cairo, Caracas, Chicago, Dakar, Estambul, Filadelfia, Johannesburgo, Londres, Los Ángeles, Ciudad de México, Melbourne, Nueva Delhi, Nueva York, París, Roma, Sao Paulo, Seúl, Toronto y Varsovia) para crear iniciativas conjuntas de lucha contra el cambio climático.
La apuesta de la Ciudad de Madrid
El Gobierno de la Ciudad de Madrid ha realizado una importante apuesta para tratar de frenar el ritmo del calentamiento global, reduciendo las emisiones de gases con efecto invernadero a la atmósfera.
Se trata de trabajar desde la esfera local para lograr un objetivo de alcance global. Ésa es, al menos, la filosofía que inspira buena parte de los proyectos iniciados por el actual Gobierno de la ciudad, entre los que destacan, la construcción de dos plantas de biometanización en el parque tecnológico de Valdemingómez, un proyecto que evitará la emisión de 300.000 toneladas de dióxido de carbono y generará 34 millones de metros cúbicos de biogás, energía renovable que equivale a 180 kilowatios a la hora o al consumo de 17.000 toneladas de petróleo.
El uso del biogás como recurso energético alternativo reducirá la huella medioambiental del Ayuntamiento de Madrid, ya que esos 34 millones de metros cúbicos se destinarán como combustible de una flota de 250 autobuses de la Empresa Municipal de Transportes.
Este proyecto, además de una iniciativa sin precedentes en la ciudad, es el complejo de biometanización más grande de Europa, que contribuirá a que el Ayuntamiento de Madrid continúe siendo el principal productor de energía limpia de la región. Dicha energía se obtiene a partir del tratamiento de los residuos y del aprovechamiento de aguas residuales en instalaciones municipales. Con una producción anual que en 2005 alcanzó los 762.000 megavatios a la hora, la Ciudad de Madrid generó el 6% de su consumo energético, que se situó en los 13,6 millones de megavatios a la hora. Esta energía limpia aportada por el Ayuntamiento sirve para abastecer al 16,3% de la población madrileña, es decir, a 516.903 ciudadanos, similar a los que suman los distritos de Centro, Moratalaz, Villaverde, Villa de Vallecas y Barajas.
El Gobierno de la Ciudad de Madrid logra con la construcción de estas dos plantas de biometanización un uso más eficiente de los recursos naturales, una mayor calidad medioambiental, un aire más limpio, con menos olores y una reducción de emisiones contaminantes equivalente a las que producirían 50.000 automóviles, tantos como los que hay, por ejemplo, en la provincia de Soria.
Ésta es una de las apuestas más ambiciosas y con más alcance del Ayuntamiento de Madrid, en su compromiso con el Protocolo de Kyoto. A esa iniciativa hay que sumar otras muchas, como las incluidas en la Estrategia Local para la Calidad del Aire, aprobada el pasado mes de febrero y que es la primera de esta naturaleza puesta en marcha por una administración pública en toda España, o las encaminadas a lograr un alumbrado más eficiente a partir de las nuevas tecnologías.
Fuente: noticias.info